Humedales artificiales, un aliado indispensable para la depuración de aguas residuales en unidades avícolas

La vegetación debe ser propia de la región y acordes las condiciones donde se haga la construcción.

El correcto manejo, tratamiento y disposición de las aguas residuales, son factores fundamentales para preservar la salud pública, disminuir los impactos a los recursos naturales y garantizar la productividad de las unidades productivas avícolas.

 

Propender por el desarrollo de la industria y acompañar a los productores para que cumplan las regulaciones ambientales vigentes, son algunos de los propósitos que persigue la Federación Nacional de Avicultores de Colombia por medio de su Programa de Sostenibilidad. Por eso, en el marco de una nueva jornada del webinar “LA HORA DE LA SOSTENIBILIDAD” de Fenavi, se abordó el tema de los humedales artificiales como alternativa de saneamiento de las aguas residuales, dando a conocer una opción técnicamente viable, económicamente atractiva, socialmente aceptada y ambientalmente sostenible, que permite consolidar prácticas cada vez más amigables con el medio ambiente en el sector avícola nacional.

 

En esta oportunidad se tuvo como voz experta, al ingeniero ambiental David García Correa, especialista en evaluación integral de impactos ambientales de la Universidad de Caldas, y con experiencia en el tratamiento de aguas residuales, quien expuso las bondades de los humedales artificiales.

Para empezar, el profesional ambiental, enfatiza que además de la importancia de cumplir con las exigencias de las normativas vigentes como el Decreto 050 de 2018 y la resolución 0631 de 2015, es fundamental que las personas sean conscientes de los riesgos de no contar con tratamientos de aguas residuales correctamente diseñados y construidos, de acuerdo a los lineamientos de buenas prácticas de ingeniería establecidas en las resoluciones 0330 de 2017 Reglamento técnico de agua potable y saneamiento básico RAS, la resolución 0844 de 2018 RAS Rural y el titulo J del Ras, teniendo claro que los vertimientos generan deterioro de los sistemas acuáticos y de los ecosistemas adyacentes, además de problemas en la salud de las personas que estén cerca, al ser centros de proliferación de vectores, y olores.

La vida útil de un humedal artificial depende directamente del mantenimiento y el tipo de vegetación seleccionada.

En este sentido, García, quien desde hace cinco años se desempeña como ingeniero ambiental de campo del Programa de Sostenibilidad de Fenavi Fonav, para la región del Eje Cafetero, ha sido testigo directo de la efectividad de los humedales artificiales como complemento al sistema séptico.

 

Los humedales artificiales pertenecen a las denominadas tecnologías no convencionales, o tecnologías de bajo consumo de tratamiento de agua residual y dentro de sus ventajas se destacan el consumo energético nulo, debido a que el proceso de depuración lo realizan plantas, también hay disminución de olores, especialmente con los humedales de flujo subsuperficial (HAFSs) pues el agua no está en contacto con la atmosfera y de esta manera se reduce drásticamente la generación de olores y mosquitos, siendo a su vez, alternativas de bajo costo y fácil mantenimiento.

 

Para el caso concreto de las granjas avícolas, el ingeniero García recomienda los humedales de flujo subsuperficial (HAFSs). Estos se pueden diseñar de diferentes tipos: flujo descendente, flujo ascendente, flujo turbulento, y mixtos.

 

A la hora de su construcción, es muy importante que sean completamente impermeabilizados para así evitar que las aguas lluvias ingresen al humedal a través del suelo y de la misma forma evitar que las aguas del humedal no contaminen las aguas subterráneas o las aguas de filtración.

 

Por último, la invitación es a que los empresarios y dueños de las unidades avícolas conozcan los aspectos técnicos que exige la ley, para que su humedal cumpla con los requerimientos y funcione de manera correcta.

 

Recuerde que, si necesita asesoría técnica y acompañamiento para la construcción de su humedal, Fenavi pone a disposición el equipo de profesionales del Programa de Sostenibilidad ubicados a lo largo y ancho del país, listos para ayudarle.

Para tener en cuenta
- Los humedales deben tener una profundidad entre 0,8 a 1,2 mts.
- La cantidad de vegetación, depende del área del humedal.
- El humedal debe de estar diseñado de acuerdo a los parámetros de diseño del sistema séptico (caudal de diseño).